Guinea Ecuatorial sigue inundada en la corrupción, la pobreza y la represión bajo el gobierno del presidente Teodoro Obiang Nguema Mbasogo, que lleva en el poder desde 1979. Los enormes ingresos procedentes del petróleo financian los fastuosos estilos de vida de la pequeña élite que rodea al Presidente, mientras que la mayoría de la población vive en una situación de pobreza.El gobierno practica regularmente la tortura y la detención arbitraria. Los periodistas, las organizaciones de la sociedad civil y los miembros de la oposición política se enfrentan a una dura represión oficial.
El presidente Obiang, que tras de la caída de Muammar Gadafi se convirtió en el mandatario que por más tiempo ha gobernado en África, continuó intentando mejorar su imagen internacional. En 2011, asumió la presidencia rotatoria de un año de la Unión Africana (UA), pero no logró convencer a la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO) de que concediera un premio con su nombre que llevaba paralizado desde hace tiempo.